VOLVIÓ EL GIO, VOLVIÓ SU MAGIA, PERO NO ALCANZÓ PARA GANAR

La letra de un reconocido tango decía “volvió una noche, no la esperaba…”. Pero a este sí lo esperaban. Giovanni Moreno, volvió a jugar tras casi 7 meses de ausencia por la rotura de ligamentos que sufrió aquel 13 de febrero frente al mismo rival de hoy y en su propio estadio. Sin embargo, su ingreso en el segundo tiempo no alcanzó para cambiar el rumbo de un partido pobre, aburrido y con escasas situaciones de gol. Racing volvió a empatar 0 a 0 como la semana pasada y empieza a sembrar dudas con respecto a su rendimiento.
En la primera etapa el partido fue muy trabado, con mucha fricción, con poco volumen de juego y prácticamente sin llegadas a los arcos. Apenas se puede contabilizar un remate cruzado desde la derecha de Lucas Castro que pasó cerca del palo derecho tras una mala salida de Cambiasso y un remate de afuera de Perea que retuvo muy bien Saja sin dar rebote. Muy pobre lo de ambos equipos.
En el segundo tiempo no cambió mucho. Ninguno de los dos se decidía a tomar el protagonismo y les costaba crear juego. Racing extrañó demasiado a Teo Gutiérrez ya que ni Lugüercio ni Hauche tuvieron peso en ataque, Castro no supo imponer su juego y Toranzo pecó de impreciso. Por ese motivo Simeone movió el banco a los 15 minutos y decidió el ingreso de Gio Moreno por Lucas Castro y ubicó al astro colombiano a jugar por la derecha. Se lo vio un poco lento y falto de ritmo en su regreso, pero con poco demostró que con su talento será fundamental para jugar en ataque. Pese a esto fue el local quien estuvo más cerca de abrir el marcador cuando en una pelota parada Saja sale mal a cortar el centro y Perea define con el arco vació y el propio Gio salva en la línea. A poco del final expulsaron a Matías Martínez y Racing terminó defendiendo el punto cerca de su propio arco.
Nuevamente fue empate. La Academia salvó la ropa y mantiene el invicto, aunque su rendimiento viene en baja. Lo positivo es que para la próxima fecha, frente a Olimpo podrá contar por primera vez con los dos colombianos, Teo y Gio, con la esperanza de recuperar el buen juego y la racha ganadora.
Volvió Gio, volvió una noche, pero a este sí lo esperaban. Solo falta que ponga su magia en funcionamiento para ilusionarse con un Racing más vistoso y efectivo si es que realmente tiene intenciones de pelear el campeonato.