El hincha de Racing deseaba que llegara el domingo para renovar su ilusión. Tenía motivos de sobra, primero porque un nuevo campeonato siempre enciende la ilusión, y si a eso le sumamos el debut del Coco Basile en el banco confirma que esta ilusión tiene sustento. Sin embargo, en esta primera fecha chocó con la prolijidad de un equipo como Tigre que salió a jugarle de igual a igual, que incluso pudo haber ganado si hubiera concretado las situaciones que tuvo. Fue 0 a 0. Un empate que parece poco, pero que sirve para empezar a sumar.
En la primera etapa el partido fue parejo. Racing, con un Giovanni Moreno que arrancó encendido trató de adueñarse de la pelota pero nunca encontró un socio. Lucas Castro sigue en su bajo nivel, Hauche por momentos se acopló muy bien pero no fue suficiente, Teo Gutiérrez tuvo que bajar muchas veces para ponerse en contacto con la pelota ya que no le llegaba y por eso el equipo no tenía profundidad. Tigre, con el buen manejo de Román Martínez y de Diego Morales más un Luna activo inquietaron más de una vez el arco bien defendido por Sebastián Saja.
En el segundo tiempo, con el ingreso de Toranzo, Racing trató de darle más volumen de juego y por momentos lo tuvo. Pudo abrir el marcador Hauche en dos ocasiones pero García le contuvo ambos remates. Con el correr de los minutos Tigre fue mejorando y tuvo las mejores situaciones de gol, incluso debió ganar el partido, pero tuvo enfrente a un seguro Saja que mantuvo el arco en cero. Sobre el final Racing casi lo gana tras un desborde del recién ingresado Viola que Teo no llegó a conectar y luego Gio Moreno no pudo definir. Fue empate nomás. Muy poco lo del equipo de Basile.
Se sumó un solo punto. El rendimiento del equipo fue preocupante pero hay tiempo para mejorar. Como dijo alguna vez Renato Cesarini: “Cuando no se puede ganar hay que tratar de no perder...”
No hay comentarios:
Publicar un comentario