Después del pálido empate frente a Tigre por la primera fecha Racing viajó a Mendoza con la esperanza de recuperarse pero fue en vano. Cayó frente a Godoy Cruz por 1 a 0 y aparte de ser la primera derrota del ciclo de Basile nuevamente el equipo volvió a jugar mal dejando muestras de preocupación en su director técnico.
En el arranque del partido Racing salió a ganarlo y tuvo su primera situación de gol a los 3 minutos cuando el remate de Hauche se estrelló en el travesaño tras un centro de Teo Gutiérrez. Con el correr de los minutos el partido se emparejó, aunque Godoy Cruz nunca pudo inquietar el arco defendido por Saja. Lo tuvo Gutiérrez, tapó muy bien Ibañez que poco a poco se convertiría en figura. Al Tomba le costaba hacerse de la pelota, Ramírez y Caruso estaban muy alejados del circuito de juego y encima a los 39 minutos se quedaba con un jugador menos por la tonta expulsión de Falcón por agredir a Giovanni Moreno.
En el segundo tiempo Pumpido decide el ingreso de Villar por Caruso para tener la pelota y no dejar crecer a su rival, que puso en cancha a Toranzo para darle más volumen de juego sacando a un apático Lucas Castro que demuestra que su nivel decae partido a partido, también entró Viola por Lluy para hacer un planteo más audaz aunque le faltó profundidad, ya que Gio Moreno no supo convertirse en el conductor del equipo y Racing lo sintió.
El 0 a 0 parecía inamovible hasta que a los 39 minutos vino la sorpresa. Rojas habilita muy bien a Sigali y este define en soledad por debajo del cuerpo de Saja para decretar el 1 a 0. Un balde de agua fría para el Coco Basile y sus dirigidos que nunca supieron aprovechar el hombre de más.
Terminó el encuentro y Racing se vuelve de Mendoza con una derrota dolorosa e inesperada, ya que de dos partidos jugados el equipo no ganó y ni siquiera marcó goles. La ilusión en este campeonato es salir campeones, aunque jugando así se estará muy lejos de cumplir ese objetivo.
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